El pájaro paraguas de barbas largas, también conocido como pájaro toro, es una especie de cotinga que, al igual que el famoso gallito de las rocas, utiliza leks para buscar pareja. Los machos utilizan los leks para realizar su gran espectáculo de cortejo en el que lucen las finas plumas de su cresta, cubriendo sus cabezas hasta el pico, como un copete peinado por el peluquero más extravagante. También se parecen bastante a los paraguas, lo que les da su nombre común.

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Durante esta demostración de talento, se extiende un gran y extraño péndulo -de donde surge su nombre científico penduliger- que cuelga sobre su pecho a modo de corbata, inflándolo para mostrar todo su esplendor con las cortas y brillantes plumas que lo rodean, todas erguidas. Los pájaros paraguas cantan poderosos cantos en los leks, como dando un buen golpe de cuerno, un grito de amor serio y sentido.

El pájaro paraguas de barbas largas sólo vive en el Chocó, en el oeste de Colombia y Ecuador, en las laderas de los Andes, interconectado con las selvas tropicales al pie de las montañas y las tierras bajas que miran al Océano Pacífico.

Se alimenta de numerosos frutos diferentes, eligiendo normalmente los frutos grandes de las palmeras de la familia Arecaceae, o también de árboles y arbustos de las familias Lauraceae y Myrtaceae.

Al comer fruta y luego regurgitarla, es una especie importante para el bosque ya que ayuda a dispersar las semillas. También se alimenta de insectos y pequeños vertebrados como lagartos. Fuera de los leks no es habitual ver a estas aves juntas; Al igual que el gallito de las rocas, sólo la hembra se encarga de incubar los huevos -normalmente en nidos encima de las palmeras- y alimentar a las crías. El macho se dedica a decorar su cuerpo, cantar e inflar su péndulo.

Se trata de un ave enigmática del Chocó, increíblemente rara y apreciada por los amantes de las aves. Sin embargo, en algunos lugares, como Mashpi Lodge (uno de los mejores lodges de selva tropical del Ecuador para la observación de aves) existen poblaciones ubicadas, por lo que es fácil verlas y admirarlas ya sea después de una buena caminata o desde la comodidad del hotel. Esta especie se encuentra en estado vulnerable de conservación y sus poblaciones están disminuyendo debido a la destrucción acelerada de bosques generada por la ampliación de los límites urbanos y agrícolas. Pero Mashpi tiene una gran extensión de bosque, y todos los que trabajan allí están haciendo todo lo posible para conservarlo y protegerlo.